Este fin de semana, la rotonda entre la avenida de los Països Catalans y la calle Viladordis en Manresa ha sido el escenario de una emotiva inauguración: una réplica a tamaño real del legendario coche PTV, símbolo de la ciudad y origen del Clàssic Motor Club del Bages. Más de un centenar de personas, incluidos coleccionistas y miembros de las familias fundadoras, han asistido al evento.
Celebración y reconocimiento
Moderada por la concejala de Cultura, Tània Infante, la ceremonia ha contado con parlamentos de figuras destacadas como Toni Tachó Figuerola, presidente del Clàssic Motor Club del Bages, Manuel Perramon Ferran, de la empresa AUSA y el alcalde de Manresa, Marc Aloy. Tachó ha resaltado la importancia histórica del PTV, un coche que dio trabajo a muchos manresanos y del que se fabricaron 1.100 unidades, de las que todavía se conservan 110 en todo el mundo.
El PTV: orgullo manresano
El presidente del Clàssic Motor Club del Bages propuso que Manresa se convierta en la capital de los encuentros internacionales de microcoches, destacando el impacto social del PTV, que permitió a muchas familias acceder a un vehículo motorizado. Manuel Perramon, en representación de las familias fundadoras, expresó su orgullo de ver el reconocimiento permanente de este vehículo, parte esencial de la historia familiar y de la ciudad.
Una escultura para la historia
El alcalde Marc Aloy elogió la escultura, situada en una avenida clave que conecta varios barrios y acoge a diario a miles de vehículos. Destacó que el PTV simboliza la determinación y el sueño de hacer accesible un vehículo para todos.
El PTV: emblema de la innovación manresana
La manresana AUSA, conocida por sus vehículos industriales compactos, fue fundada por las mismas familias que crearon el PTV. Este coche de los años sesenta, que lleva las iniciales de los fundadores, sigue siendo un emblema de la innovación y el empuje de Manresa. La escultura recientemente inaugurada sirve como homenaje a ese legado e inspira orgullo entre los residentes de la ciudad.
Esta celebración es un recordatorio de la riqueza histórica de Manresa y del papel fundamental que jugó el PTV en la vida cotidiana de muchos manresanos.